Una nueva excursión, en esta ocasión por tierras navarras, concretamente al concejo de Uitzi, en el municipio de Larraun. Años atrás se explotaron minas de galena y cinc en el paraje conocido como Arruitzgain, en lo alto de la sierra que bordea el pueblo.
Hacia allí nos dirigimos, por la empinada pista que parte desde la vía verde del antiguo tren minero de Plazaola. Tras unos 45 minutos de camino alcanzamos la parte superior de la sierra, un lugar poblado por hayedos y en el que se hace extraño imaginar el trajín de una explotación minera.
Pero aunque casi mimetizadas por la vegetación, las paredes de algunos edificios relacionados con las antiguas labores, son testigos mudos de lo que allí acaeció décadas atrás. El musgo y la vegetación recubre casi totalmente las catas abiertas en la tierra, y solo un par de escombreras son fácilmente identificables entre los árboles.
Se trata de los restos de la Mina Concha, que proporcionó galena y minerales de zinc que eran transportados hasta la costa vasca por el tren de Plazaola.
Removiendo la parte superior de la escombrera pudimos recoger muestras de hidrocincita y smithsonita, destacando algunos ejemplares de este último mineral.
Un breve descanso para recuperar fuerzas y de nuevo enfilamos en camino para descender a Larraun para dar buena cuenta del almuerzo.
Ya por la tarde nos esperaba una visita totalmente diferente, y con un marcado carácter geológico y paleontológico: la Cueva de Mendukilo.
Enclavada en el valle de Larraun, concejo de Astitz, en Lekumberri, se adentra en el corazón de la Sierra de Aralar, mostrando unas espectaculares formaciones geológicas. Una breve explicación audiovisual proyectada en el centro de visitantes sirvió como antesala a la visita guiada que habíamos reservado con antelación.
Tras una hora en el interior de la cueva observando los tesoros que encierra, finalizamos la jornada y emprendimos en camino a casa.